Hoy en nuestro blog conocemos a Dave Van Acker alumno del Máster en Dirección Hotelera de nuestra escuela ESAH.
Con experiencia en el sector turístico, consideró que debía conocer otros departamentos y apostar por la formación para disfrutar de nuevos retos profesionales en el futuro.
Un alumno que quiere seguir aprendiendo de un sector que le entusiasma y en el que estamos seguros va a seguir disfrutando de un gran futuro profesional.
>>Hola Dave, nos gustaría conocerte un poco mejor, ¿Podrías resumirnos tu trayectoria y experiencia en el mundo de la hostelería y el turismo?
Buenos días. Pues ya son 20 años que trabajo en el sector de hostelería.
A los 18 años me gradué como agente de viajes en el Instituto Sint-Jozef en Brujas. Los años de estudio son un poco diferentes en Bélgica que en España. No quería terminar en una oficina todo el día vendiendo viajes, que también me gusta, pero no me veía haciéndolo. Por eso hice un año de especialización en guía turística, representante local y animación turística. Cada especialización tuvo sus semanas de prácticas en Bélgica, menos animación. Ahí nos mandaron a España a hacer practica en un hotel con la cadena Sol Meliá. Después de mis 6 semanas de practica me ofrecieron un contrato, y así empezaros mis años en el mundo de hostelería.
Mis primero 4 años los pasé en Magalluf, Mallorca. Y realmente hice de todo. Desde animación infantil, animación para adultos, espectáculos, decoraciones, relaciones públicas... de todo.
Mi quinto año pasé entre Tenerife y Benidorm, siempre hoteles de 3 y 4 estrellas. Son hoteles de familias con niños con animación a tope.
Luego me volvieron a mandar a Mallorca, pero en el puesto de jefe de animación. Aquí empecé a crecer mucho profesionalmente. Por primera vez tenía la responsabilidad de organizar los plannings y llevar un equipo de animadores. Aprendí muchísimo este año, sobre todo, de que no siempre puedes ser el amigo de toda tu plantilla. Dentro del hotel tenía que mentalizar que soy el jefe de un departamento y no un amigo de mi compañero. Al principio no era fácil, pero según los meses pasaban, el camino delante de mí se puse en su sitio.
Luego llegó el gran cambio en mi vida. Me mandaron a Canarias. Casi 5 años estuve trabajando en La Palma donde me desarrollé aún más. Aquí aprendí mezclar mi trabajo con algunas de mis pasiones. Seguí llevando el departamento de actividades, pero también empecé a montar y coreografiar espectáculos y fiestas. Además, también hice partes del vestuario y decoraciones con materiales recicladas. Por ejemplo, hice un barco de piratas enorme para el espectáculo de Peter Pan hecho de botellas de plástico y papel de periódico.
Después de La Palma, llegué a Gran Canaria. Mi primer hotel de 5 estrellas. Un cambio radical. Se terminaron los espectáculos, las fiestas, las locuras. Con la clientela de un hotel 5 estrellas tenía una relación completamente diferente. La palabra ‘’usted’’ era clave, hasta que la persona diga el contrario. También el programa de actividades era muy diferente. Actividades de salud, gimnasia, talleres y hasta alguna excursión.
Y después de 12 años llegue a mi destino final. Tenerife. Ya llevo aquí 7 años, pero no siempre de jefe de animación. Cuando llegue ya tenía el gusanito en el estómago de conocer más departamentos dentro del hotel. Por mi propia cuenta me relacioné con personal de otros departamentos, no solo porque me llevo bien con ellos, sino también para ver un poco como era el funcionamiento de su departamento. También implanté con aprobación de la dirección del hotel ‘’conoce mi departamento’’, donde el empleado del mes lleva a algunos de otros departamentos a su departamento y explica brevemente las funciones y tareas que se hace.
2020. Llego la cuarentena y había muchos despidos. Por desgracia me tocó. Pero no lo tomé como el fin de mi carrera, sino como un nuevo reto en mi vida. Lo vi como una señal de que es hora de que me planteo de crecer profesionalmente.
Hablando con mis padres, mi pareja y unos amigos, decidí de estudiar un Máster de Dirección Hotelera.
Por suerte encontré un puesto de recepcionista con horarios reducidos en un complejo de propiedad y viviendas vacacionales. Perfecto para combinar mis estudios con mi trabajo.
Actualmente sigo en esa recepción por las mañanas. Pero aparte de eso, trabajo para una empresa que lleva espectáculos a los hoteles como consultor, organizando y mejorando las fiestas tematizadas. Además, he sido contratado de coordinador de animación para enseñar a nuevos animadores y mantener un seguimiento en los hoteles para ver si todo funciona correctamente o si hace falta implantar cambios.
>>¿Por qué pensaste en realizar el Máster en Dirección Hotelera?
Los últimos años como jefe de actividades me sentí como que ya he sacado todo de mi en tema de animación y actividades turísticas. Necesitaba algo más para crecer, incluso ya estaba pidiendo un plan de desarrollo para cambiar a recepción, calidad y guest experience management. Me gusta el contacto con los clientes y me parecían las mejores opciones para tomar nuevos retos y seguir estar en contacto con los clientes.
En la situación que he y hemos pasado, hubo mucho tiempo libre. Y ese gusanito de que querría formarme seguía ahí. Así que me puse a investigar por internet, redes sociales e incluso hablé con una amiga que justo terminaba su Máster en dirección hotelera.
Me puse en contacto con algunas universidades para pedir información, pero la que más rápido contestó y la información más completa que me daba era ESAH. Incluso me mandaron un resumen de los módulos que se trataba durante los estudios y me resultaron muy interesante.
No tuve que pensarlo mucho. Una semana más tarde ya me apunté y empecé a estudiar.
>> ¿Qué crees que te han aportado estos estudios?
Había bastante cositas que ya sabía sobre el funcionamiento de los hoteles. Pero era todo conocimiento operativo. Durante los estudios aprendí por qué se operaba en ciertos modos.
Otro tema que era muy interesante para mí que no tenía conocimiento es el tema de restaurante y cocina, sobre todo el tema de los escandallos. En muchas ocasiones escuche hablar del coste de cubierto, pero nunca entendía de donde sacaban estos números.
Creo que en general me ha enriquecido el conocimiento de los operativos internos y legales del mundo de hostelería. Porque aparte de hoteles, también se puede aplicar en otras empresas como restaurantes y bares.
>> ¿Cómo valoras estudiar un máster en dirección en formato online? ¿Qué te ha sorprendido?
Para mí lo mejor fue el diseño del campus online, Es decir, la materia física, los textos, todo estaba ahí. Pero también los webinars. Esto me ayudo mucha a entender parte de la materia que no captaba bien. De todos modos, en la misma plataforma están todos mis profesores y sus contactos por si tenía preguntas o dudas. Esta combinación era perfecta para estudiar un máster online.
>> ¿Qué destacarías de la formación de nuestra escuela?
La flexibilidad que he tenido para organizar mis horarios de trabajo con los tiempos de estudio. Si tenía un día o una semana con mucho trabajo, podía dejar los estudios y seguir cuando podía.
>> ¿Por qué animarías a otras personas a formarse y obtener una titulación como la que tú ya posees?
Seguro que suena un poco cliché, pero es como la gente dice: nunca es tarde para estudiar y aprender.
Me ha gustado mucho la asignatura de dirección hotelera porque son varios temas y se trata de todo. Siempre hay personas que no saben o no están seguro de que hacer en tema trabajo, y dirección hotelera habla de cada aspecto de un hotel, no solo un departamento.
También creo que el turismo es un sector que nunca va a desaparecer, sino el contrario. Siempre habrá trabajo en el sector de hostelería. Algunas veces más, algunas veces menos, pero siempre habrá. Por eso está bien tener una formación como dirección hotelera. Te da más opciones para luego incorporarte más fácil en los hoteles.
>> Si te preguntara cómo te ves en 10 años profesionalmente ¿qué nos dirías? ¿Algún reto que te gustaría alcanzar, sueño por cumplir?
Espero en breve encontrar un trabajo estable en los hoteles de nuevo, y con suerte, en unos años llego hacer adjunto dirección o incluso director de un hotel.
También aprendí decir ‘’nunca digas nunca’’. Puedo que algún día en mi vida se presenta una oportunidad o un nuevo reto y me cambio isla o incluso me cambio de país. No descarto nada. Por eso intento vivir ‘’day by day’’. Así aprendí estresarme menos y planificar el futuro mejor.
¡Muchas gracias, Dave!