Curiosidades que todo amante del queso debe saber

El queso es uno de los alimentos más populares del mundo. No son muchas las personas que puedan decir que no les gusta algún tipo de queso. Sin embargo, si son muchas las que tienen claro que es un producto que les apasiona. Y es que, dentro de los productos lácteos, el mundo de los quesos es prácticamente inabarcable.

El queso: un alimento apreciado en el mundo entero

En todo el mundo, existen más de 2000 variedades de queso, de ellas más de 200 se elaboran en España. Prueba a pensar en la gastronomía griega sin el queso feta, o en una pizza italiana sin la mozzarella, o en viajar a Holanda sin probar in situ un buen gouda.

Para empezar debes saber que los amantes del queso tienen un término propio que les identifica: “turófilo”. La palabra procede del griego clásico donde “Tyros” significa “queso” y “Philos” se traduce como “amor a”. El amor al queso va mucho más allá de la apreciación de su sabor, como por ejemplo el gusto por su olor (lo que a otras personas les desagrada bastante).

A los investigadores les ha llamado la atención el hecho de que a algunas personas les guste tanto el queso. Han hecho estudios y llegado a la conclusión de que la caseína, una proteína presente en este alimento, puede causar un efecto placentero a través de las casomorfinas un péptido opioide que se libera durante la digestión y nos genera una cierta sensación de bienestar.

Son muchas las teorías que tratan de explicar el surgimiento del queso. Parece que su origen estaría en Oriente Próximo, aunque los expertos no se ponen de acuerdo en las fechas, suele situarse hace unos 8000 años, en plena época neolítica. En Egipto y en Mesopotamia se localizan los hallazgos más antiguos de la elaboración del queso. Se trata de un alimento que tenía muchos beneficios, ya que presenta un alto índice de contenido en grasa y en proteínas así como de minerales como el calcio y el fósforo. Pero además, es un alimento fácil de conservar y de transportar.

Una fecha que se tiene mucho más clara es la de la inauguración de la primera fábrica de quesos. Esto ocurrió en Suiza, en el año 1815, hasta entonces los quesos siempre se habían hecho en las casas siguiendo los métodos artesanales para aprovechar la leche.

Los lugares donde se consume más queso

Si te preguntas cuál es el país del mundo donde más queso se consume te diremos que es Grecia, con una media de 37 kilos por habitante al año. Lógicamente el feta es su queso estrella. En España la Comunidad donde más queso se consume son las Islas Canarias, seguida de cerca por Murcia, Valencia y Asturias. Sin embargo, el mayor productor de quesos del mundo son los Estados Unidos que llega a las 4300 toneladas anuales.

Aunque prácticamente cualquier tipo de leche es buena para hacer queso (búfala, oveja, cabra, alce…) la más utilizada es la de vaca.  Pero el queso más caro del mundo se elabora con leche de burra, es el Pule, un queso típico de Croacia. Se elabora únicamente en la reserva natural de Zasavica, donde viven aproximadamente unos 100 animales de cuya leche se elabora el pule. Un kilogramo de este queso cuesta aproximadamente unos 1000 euros.

Le seguiría en la lista el “White Stilton Gold” del Reino unido, que solo se elabora en ocasiones especiales y que incluye unas virutas de oro amarillo, por lo que se considera the king of cheese. Un kilogramo puede costar unos 700 euros.

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