En los cursos de nuestra escuela online ESAH dedicados a la enología queremos que nuestros alumnos puedan especializarse y conocer todo sobre el cultivo de la uva, la elaboración del vino y su tratamiento. Conocer las distintas variedades y bodegas es otro de los objetivos que nos marcamos. Hoy nuestro post está dedicado a los vinos de “Pitarra” de la región española de Extremadura.
Vino de Pitarra
“Pitarra”, ancestralmente se le denominaba a una tinaja pequeña de barro, y al vino que se hacía desde época prerromana en las pequeñas bodegas familiares de distintas zonas de Extremadura principalmente y en las Comunidades Autónomas de Castilla y León y también en Andalucía. Pero con esta denominación de “Pitarra”, prácticamente se denominaban en Extremadura. Puede ser también en otras zonas de España que se denomine a este tipo de vinos, “vinos de cosechero”.
El vino de Pitarra es así un vino típico de algunas regiones de Extremadura, predominante en la comarca de Montánchez y en pueblos de Cáceres como Cañamero y en la sierra de Gata.
La Sierra de Montánchez, se encuentra localizada en el centro de la región, a continuación de las Sierras de Guadalupe. En sus estribaciones destaca el bosque mediterráneo de encinas y alcornoques formando algunas dehesas de tamaño medio, además del cultivo del olivar y la higuera hay, en muchos casos cultivo asociado con la vid.
Su elaboración es totalmente artesanal y se realiza en unas tinajas de barro llamadas pitarras que dan nombre al vino, normalmente para el consumo familiar.
La uva, se despalilla manualmente en las “barandas” se pisa y se vierte en la tinaja donde fermenta durante uno o dos meses aproximadamente. Durante este tiempo se revisa periódicamente la tinaja para que no formen velos de bacterias acéticas. La fermentación, en el caso de uvas tintas y blancas se realiza en presencia de los hollejos. Se suelen descubar cuando cae el “sombrero” al fondo.
Para “esterilizar” los envases se utilizan “pajuelas “y en caso de añadir SO2 se suele añadir en forma de metabisulfito potásico. Una vez fermentado se trasvasa a una tinaja vacía.
No se usan, apenas, ningún tipo de producto enológico y el resultado es un vino: “natural”, turbio, a veces opalescente, normalmente alcohólico y escaso de acidez total. Es frecuente encontrarlos con una acidez volátil, un tanto elevada, a veces.
El vino de Pitarra más común es blanco y se emplean variedades como: pedro ximénez y borba, aunque también se elaboran rosados y tintos
Características del vino de Pitarra
Clima: mediterráneo de interior.
Temperaturas: Son muy extremas. Medias de 4º C en invierno y de 24º C en verano. Esto es debido a que no recibe influencia marina.
Precipitaciones: Llueve algo más, que, en el clima mediterráneo típico, sobre todo en primavera y en otoño. La cantidad total de lluvias anuales es poca de: 300 a 500 mm.
Suelos: pobres en materia orgánica y predominan los graníticos y los de pizarra.
Variedades de uvas en Extremadura
Tintas: bobal, mazuelo, monastrelll, tempranillo, garnacha, graciano, merlot, syrah y cabernet sauvignon.
Blanca: borba, cayetana blanca, chardonnay, chelva, malvar, viura, parellada, pedro ximénez, verdejo y eva de los santos.
Gastronomía
No cabe duda de que, en este caso hay que aplicar esta teoría que se me ocurre: “donde fueses come y bebe lo que hubiese”.Por lo tanto, con la gastronomía más rustica de la zona como son las calderetas de cordero, la prueba de cerdo y la carne de cerdo de las matanzas, como ejemplo, van muy bien este tipo de vinos. Los más “añejos” se consumen con aperitivos o con entradas y aquellos que han sufrido una crianza bilógica acompañan sin complejos a quesos de cabra, oveja y vaca todos ellos curados.
Servicio
Tomar más bien frescos en torno a unos 12 grados de temperatura.
Los “pitarra” son fundamentalmente vinos de cosechas particulares. La elaboración no suele ser mayor que la capacidad de un cono o tinaja, normalmente de poca capacidad, en algún caso de unos mil litros. Su consumo era para la familia del productor. Pero como tienen y tenían mucha aceptación, este tipo de vinos han resultado un negocio importante en muchos casos.
Hay pequeñas bodegas, en el norte de Cáceres, de más capacidad y producción que comercializan el vino a nivel local principalmente. En Trujillo, una bodega de tamaño medio elabora también un ”pitarra” que tiene mucha aceptación en el ámbito provincial.
En el sur de Badajoz, se cosechan, en bodegas e incluso en algunas cooperativas este tipo de vinos. En esta zona son los pequeños bodegueros, los que hacen “los pitarras” de forma artesanal y para consumo “casero”.
¿Quieres conocer más sobre el mundo del vino? ¿Quieres especializarte? Te animamos a conocer la variedad de cursos online de enología de nuestra escuela de hostelería y turismo, ESAH.
ESAH, Estudios Superiores Abiertos de Hostelería es la escuela de restauración y turismo online de referencia a nivel internacional de La Escuela de Hostelería de Sevilla, el Grupo Lezama, y SEAS, Estudios Superiores Abiertos (Grupo San Valero). Visita EstudiaHosteleria.com para consultar nuestra oferta formativa de cursos y másters. Formación profesional para el empleo de calidad y accesible para todos.
No hay comentarios