El hidromiel es una de las primeras bebidas alcohólicas que hemos consumido los humanos. Se trata de una bebida que se obtiene de la fermentación de una mezcla de agua y miel. La graduación alcohólica que alcanza depende de la relación de miel y agua y de la tolerancia de las levaduras al alcohol. Se cree que su descubrimiento fue casual debido al proceso natural de fermentación de la miel, mediante el que sus azúcares se van transformando en alcohol.
Los primeros testimonios del consumo de hidromiel
Prácticamente, podemos decir que todas las civilizaciones antiguas han consumido el hidromiel. La prueba más antigua que se conserva de su consumo probablemente sea una vasija de barro china del 7000 a. C. que contenía una mezcla de hidromiel con arroz y frutas.
La primera referencia escrita la encontramos en el himno Ninkasi (hoy en el Museo del Louvre de París), una tabla de arcilla del año 1800 a.C. que es un rezo a la diosa sumeria de la cerveza. También se menciona en los versos del Rig Vedá (compuesto entre el 1700 a. C. y el 1100 a. C.), uno de los libros sagrados del Vedismo.
Los griegos eran muy aficionados al consumo del hidromiel. El propio Aristóteles habla de los motivos a favor y en contra del consumo de esta bebida. Mientras que Hipócrates mantenía que su consumo era beneficioso para la salud pues ayudaba a purificar el cuerpo.
Los romanos llamaban al hidromiel “agua mulsum”, el gran Julio César la consideraba su bebida favorita.
Entre los pueblos europeos también se le atribuían importantes propiedades energéticas y digestivas al hidromiel. Se consideraba la bebida de los dioses, por lo que también se llamaba “Néctar divino”. Esta bebida formaba parte de sus tradiciones y fiestas y también de su mitología. Tanto los pueblos nórdicos como los anglosajones contaban con cantares épicos que los que se narraban todas las bondades del consumo de esta bebida. Los guerreros creían que cuando llegasen al Valhalla beberán hidromiel, ofrecida por las valkirias, durante toda la eternidad.
Una bebida presente aún hoy en día
Al hidromiel se le atribuían también propiedades afrodisiacas. Según una tradición de los teutones del s XVI, las parejas que quisieran tener un niño tenían que beber hidromiel el mes lunar siguiente a su boda que se habría celebrado en luna llena. Curiosamente, este es el origen de la expresión “luna de miel” que conservamos en la actualidad.
Lo cierto es que el consumo de esta bebida comenzó a declinar hacia el siglo X en casi toda Europa, debido a que se hicieron mucho más populares otras bebidas fermentadas como son el vino y la cerveza. Su consumo se fue reduciendo a las zonas del norte donde el clima no les permitía cultivar las vides.
El cine y la literatura han tenido muy presente a esta bebida. Así la vemos aparecer en novelas como El médico de Noah Gordon o Canción de hielo y fuego de George R. R. Martin. También en películas como Beowulf de Robert Zemeckis; El señor de los anillos de Peter Jackson o Robin Hood, príncipe de los ladrones de Kevin Reynolds. Por supuesto, Asterix y Obelix en los cómics también consumen esta bebida.
Hoy en día hay una tendencia al resurgimiento de esta bebida como un intento de mantener las tradiciones ancestrales.
En nuestro Curso de Cata y Elaboración de Cerveza aprenderás los procesos de elaboración, composición, estilos y cata de cerveza.
ESAH, Estudios Superiores Abiertos de Hostelería es la escuela de restauración y turismo online de referencia a nivel internacional de La Escuela de Hostelería de Sevilla, el Grupo Lezama, y SEAS, Estudios Superiores Abiertos (Grupo San Valero). Visita EstudiaHosteleria.com para consultar nuestra oferta formativa de cursos y másters. Formación profesional para el empleo de calidad y accesible para todos.
No hay comentarios