Elena Borrego, alumna de ESAH, abre su propia pastelería en Salamanca

El inicio de un blog, mirecetario-elena.blogspot.com a principios de 2011, llevó a una periodista aficionada a la pastelería, a cumplir uno de sus sueños: abrir una pastelería.

Aunque tener su propia pastelería era un sueño a largo plazo, éste llegó mucho antes de lo que había pensado y Elena Borrego abrió las puertas de Llebrés el 1 de noviembre de 2017 en Salamanca.

 

>> ¡Hola Elena! ¡Qué sensación ver cumplido tu sueño! ¿Cómo fue ese primer día en el que abres las puertas de tu pastelería?

Sentí nervios y vértigo. De hecho, tanto el primer día, como los previos a abrir, sentía que haber iniciado tan pronto mi propio negocio me venía grande. Es una responsabilidad bestial, de la que fui consciente los primeros días que abrí las puertas.

No obstante, he de reconocer que mis primeros presagios no estuvieron nada desencaminados de lo que fue realmente el primer día: ¡no entró nadie!

>> ¿Qué ofreces en Llebrés?

Ofrezco pastelería artesana, elaborada por mí, con todo el mimo y el cariño del mundo, con los mejores ingredientes naturales, tal cual la prepararíamos en nuestras casas.

Fundamentalmente, repostería francesa (macarons, entremets, quiches, tartaletas dulces…) y anglosajona (cupcakes, layer cakes, cookies, brownies…) y elaboraciones propias, ideales para acompañar un café o un té.

>> ¿Cómo ha sido la respuesta del público? Una vez puesto todo en marcha, ¿ha habido algo que te haya sorprendido de la realidad de una pastelería?

Llevo muy poquito tiempo, por lo que me parece pronto evaluar la respuesta del público. Teniendo en cuenta que he abierto hace escasos tres meses, en general, no me puedo quejar. La respuesta de quienes han venido a probar mis elaboraciones ha sido excelente. La mayor parte ha vuelto.

En cuanto a si me ha sorprendido algo en particular de la realidad en una pastelería, podría decir que para mí todo ha sido nuevo. Desde el minuto uno, todo ha sido una sorpresa para mí. Yo no había trabajado previamente en ninguna pastelería ni obrador, no tenía ninguna experiencia previa en este ámbito. Mi única referencia era la cocina de mi casa.

>> Realmente ejercías como periodista, ¿qué te empujó a decidir definitivamente que te querías dedicar a la repostería profesionalmente?

Movida por mi afición a la cocina en general y a la pastelería en particular, abrí un blog en el año 2011. Gracias a él, al hecho de tener que publicar posts con cierta frecuencia, me fui interesando cada vez más por este mundo.

Descubrí que la pastelería era mi vía de escape de la rutina y el estrés diarios.

Poco a poco, fui probando elaboraciones más complejas, me fui fijando en libros de pastelería, otros blogs, webs… y poco a poco, de manera autodidacta, fui mejorando.

Descubrí que la pastelería era mi vía de escape de la rutina y el estrés diarios. Los fines de semana los aprovechaba para hornear y probar y para compartir mis progresos con los lectores de mi blog. La repostería se convirtió en un hobby que me hacía tremendamente feliz. Así, con el objetivo a largo plazo de abrir mi propia bakery, decidí dar un paso más y recibir una formación en pastelería con la que poner en orden todos esos conocimientos que había ido adquiriendo a base de ensayo-error.

Abandoné el periodismo por el oficio que descubrí que me hacía más feliz, por aquel que me levantaría cada mañana sin el menor atisbo de pereza, por uno de los oficios más gratificantes del mundo.

>> ¿Cómo fue el proceso de crear tu propio negocio?

Fue un proceso muy largo y tedioso. Entre las obras para acondicionar el local, licencias y permisos, tardé más de un año en abrir puertas. Ha sido un camino muy largo, en el que me he encontrado con numerosos obstáculos.

La redacción del Proyecto Final fue como el ensayo general de lo que sería la futura puesta en marcha de mi pastelería.

>> ¿Cómo te ayudó en todo esto el Experto en Pastelería Profesional en ESAH?

El curso me ayudó a poner en orden mis ideas y todo aquello que yo había aprendido de forma autodidacta. Por supuesto, también me ha servido para aprender algunas cosas que desconocía. Y la redacción del Proyecto Final fue como el ensayo general de lo que sería la futura puesta en marcha de mi pastelería.

>> Hay todavía personas que todavía les genera dudas la posibilidad de estudiar una especialidad como la pastelería con una metodología e-learning

Siempre digo lo mismo: Si eres una persona trabajadora y constante, si te gusta lo que estás estudiando, si tienes una meta clara, no importa si la metodología es online o presencial. Eso sí, al ser a distancia y no tener un profesor encima de ti que te recuerde las tareas que tienes que hacer, es importante que uno mismo se organice bien y elabore su propio calendario.

Aunque sea una plataforma online, en ningún momento te sientes abandonado.

Requiere un puntito más de esfuerzo en ese sentido. El trabajo personal y la práctica en la cocina de casa son fundamentales. En pastelería de nada vale saber teoría si no pones en prácticas las recetas, si no pruebas y pruebas, y horneas y vuelves a probar…

>> Tú cursaste el Experto en Pastelería Profesional ¿Cuál fue tu experiencia en ESAH?

Aunque sea una plataforma online, en ningún momento te sientes abandonado. El seguimiento de tu progreso con el curso, así como la rápida respuesta de los profesores a las dudas que se les plantean, te hacen sentir que están cerca de ti y que les importa que saques el mayor provecho posible del curso.

>> ¿Cuál sería tu consejo para todas estas personas que, como tú, trabajan en otro ámbito, pero la pastelería es su verdadera pasión?

Es una pregunta tremendamente complicada. Jamás diría a alguien que abandonara un trabajo por un hobby, sobre todo, tal y como están ahora las cosas. Ahora mismo, contar con un trabajo estable es un tesoro, y embarcarse en un proyecto como el mío es una lotería. Hay que tenerlo muy bien pensado y planeado.

¡Muchas gracias por tu tiempo Elena! ¡No faltará una visita a tu pastelería próximamente!