La tradición de servir un pastel en las bodas se remonta a la antigua Roma. En aquella época, se solía partir un pan por encima de la cabeza de la novia y los invitados se comían los trocitos como símbolo de fertilidad.
En Inglaterra dieron mucha importancia a la tarta nupcial, y empezaron a bañarla en brandy y a cocinarlas con mucha fruta seca y especias. Allí surgió la costumbre (que mantienen en la actualidad) de conservar un piso del pastel bien envuelto para poder comerlo en el primer aniversario de casados.
Tarta nupcial Rey Alfonso XIII con Victoria Eugenia de Battenberg
La tendencia de utilizar el color blanco nació con la Reina Victoria en su boda real celebrada en 1840, ya que es el color que se asocia con la virginidad y la pureza.
En España, la tradición del pastel nupcial fue importada de Inglaterra a partir de la boda del rey don Alfonso XIII con Victoria Eugenia de Battenberg. Este “wedding cake de Victoria” fue el primero que se vio en nuestro país y fue elaborado en el país inglés por reposteros británicos. La tarta estaba compuesta de pasta de bizcocho y crema glacée y pesaba 300 kilos. Estaba decorada por filigranas de azúcar que representaban los viñedos españoles y en el centro del pastel aparecían el escudo, el monograma y la corona real.
Tarta de SM el rey Juan Carlos de Borbón y Borbón y Sofía de Grecia y Dinamarca
Esta tarta tenía cuatro pisos y estaba decorada con cadenas florales. Como curiosidad podemos resaltar que en su cúspide, en vez de la tradicional figurita de los novios reposaba una gran corona.
De izquierda a Derecha. Las tartas nupciales de: Felipe de Borbón y Letizia Ortiz; la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín; la infanta Elena y Jaime de Marichalar; el rey Juan Carlos de Borbón y Borbón y Sofía de Grecia y Dinamarca.
Tarta de la infanta Elena y Jaime de Marichalar
La tarta nupcial fue expresamente escogida por doña Elena y puede ser considerada una antecesora de las “naked cake” tan de moda en la actualidad.
Tarta de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín
La tarta de fresitas tenía en su parte superior una réplica del palacio de Pedralbes realizada con chocolate.
Tarta de SAR don Felipe de Borbón y Letizia Ortiz
El pastel fue elaborado los gustos de los dos novios: chocolate amargo (el favorito del actual monarca) y un bizcocho con aceite de oliva, un sabor de la niñez de doña Letizia. En la tarta se agregaron el escudo real y unos anillos de boda entrelazados. El postre fue presentado en distintos niveles sobre un armazón de ébano de trece metros y medio de altura. La tarta estuvo decorada con figuras de pavos reales de caramelo.
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Licenciada en Periodismo por la Universidad San Pablo CEU- Madrid. MBA en Protocolo Institucional, Producción y Gestión de Eventos. Escuela Internacional de Protocolo y Máster en dirección de entidades deportivas. Ha trabajado en varios medios nacionales como periodista y responsable de las publicaciones de protocolo y etiqueta. En 2017 fundó Little Etiqueta y es docente del área de Organización de eventos de nuestra escuela online ESAH – EstudiaHosteleria.com Puedes consultar toda nuestra oferta formativa de cursos y másteres en nuestra web.
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